Una pequeña introducciónPrimero de todo agradeceros la enorme acogida que ha tenido este blog. Muchos desde hace tiempo, tanto amigos reales, como virtuales, ante mis intervenciones sobre energías renovables me preguntabais con frecuencia porque no expresaba todo en un blog. Mi excusa siempre había sido que yo prefiero el debate más que estructurar las ideas. Creo que ha llegado el momento de estructurarlas. En realidad todo lo que se sobre el mercado eléctrico, lo sé gracias a los que han estado o están en contra de la energía renovables (o simplemente a favor de que esta juegue un papel menor y no total en la generación eléctrica). Ello me ha obligado a buscar cantidades muy grandes de datos para rebatirlos (o no). De hecho os haré una confesión, los datos que he ido encontrando también han variado mi postura. Hace cuatro años, y ya hacía seis que estaba en las renovables, yo pensaba que era necesario complementar las renovables con la nuclear y ha sido la fuerza de los datos la que cambió mi postura. Ahora me parece una obviedad muy grande el estar en contra de la energía nuclear y me pregunto ¿cómo pude estar confundido durante tanto tiempo?.
Este es un tema introductorio. Es necesario para comprender las falsedades con las que nos bombardean sobre el sector energético. Inicialmente iba a ser una parte del capítulo “1ª falsedad sobre las energías renovables: la energía renovable es cara.”, pero dado la extensión que ha tomado, creo que es necesario separarlo. De hecho ha tomado tanta extensión que la introducción la separaremos en dos partes: Como funciona el sistema eléctrico y la que publicaré este miércoles por la tarde, costes ocultos del sistema de Generación.
El Mercado eléctrico
El sistema eléctrico funciona de la siguiente manera. Unas empresas, muchas, más de las que nos pensamos, generan la electricidad que es vertida a la red de transmisión. La electricidad que se vierte es siempre exactamente la que se consume, debido a que en principio (veremos que significa esto de 'en principio' otro día) no se puede almacenar la electricidad. Esta electricidad es distribuida por toda España a través de la red de transporte. La red de transporte es propiedad exclusiva de Red Eléctrica de España. Finalmente esta electricidad se distribuye por las distribuidoras al cliente final. Es la distribuidora la que en realidad compra en cada momento la electricidad en una especie de bolsa de los MWh con precios de estos que fluctúan. Para el distribuidor eléctrico es indiferente si la electricidad que compra es nuclear o eólica. En esta bolsa (que llamaremos a partir de ahora 'pool eléctrico'), venga de donde venga la electricidad, para un día y una hora determinada se negocia un precio fijo por cada Mwh generado. El MWh, para los no iniciados, es la medida de la energía eléctrica generada. En un coche usamos litros de gasolina y en el sistema eléctrico usamos MWh de electricidad. 1 MWh es, grosso modo, la cantidad de energía que consume una familia de dos adultos y dos niños durante 3 meses y en la actualidad 1 MWh tiene en el pool eléctrico un coste medio que ronda entre 60 € y 80 €. Este no es el único coste que paga la distribuidora eléctrica. Hay una serie de factores que hay que añadir al coste de la electricidad. Por ejemplo, para mencionar solo algunos, desviaciones en la generación cuando una central que tenía previsto producir tiene un problema técnico inesperado y debemos arrancar otra central que debía estar parada, cánones a la red de transporte, así como su mantenimiento.
Por tanto tenemos que de cara al mercado eléctrico cuesta lo mismo generar 1 MWh eólico, fotovoltaico, que uno nuclear o de gas. Posteriormente las energías que están dentro del Régimen especial, que son todas las renovables, excepto la gran hidráulica y otros métodos de generación especiales que no son renovables (por ejemplo el tratamiento de los purines) reciben una compensación por cada kWh (1000 kWh = 1 MWh) generado que depende de la tecnología y del precio del mercado. Es lo que llamamos una prima que solo se paga cada MWh que genera una tecnología determinada. Las primas del Regimen Especial (llamado REPE) salen de la factura eléctrica y hablaremos de ellas en los próximos días.
El precio en un momento determinado de la electricidad es el siguiente. Red Eléctrica determina que para una hora determinada se requieren 1000 MWh de producción. Cada planta hace su oferta de la siguiente manera:
0010 Hidraulica cantábrica: 10 MWh a 0 €/MWh
0110 Hidráulica del Ebro: 100 MWh a 0 €/MWh
0210 Eólica Mestral: 100 MWh a 0 €/MWh
0220 Fotovoltaica Miramontes: 10 MWh a 0 €/MWh
0420 Nuclear Ascó: 200 MWh a 0 €/MWh
0520 Central de gas Juanito: 100 MWh a 40 €/MWh
0620 Central de gas Pepito: 100 MWh a 45 €/MWh
0720 Central de carbón Pedrito: 100 MWh a 50 €/MWh
0920 Central de gas Jorgito: 200 MWh a 55 €/MWh
1020 Central de carbón Penibética: 100 MWh a 60 €/GWh
1120 Central de fuel Arábiga: 20 MWh a 65 €/GWh
Todos los números son hipotéticos, simplemente para explicar cómo funciona el sistema. Como lo necesario son 1000 MWh (1 GWh). Se ordenan las plantas por el precio ofertado y se contrata esta en función de la energía demandada prevista. En el ejemplo las compañías comprarán toda la producción de las centrales de la lista hasta la Central de Gas Jorgito. De la central de carbón penibética solo comprarán 80 MWh a pesar que oferta 100 MWh. Y no se comprará energía a la central de fuel Arábiga. Y aquí viene lo más interesante, el precio que pagará la compañía distribuidora no es el que se oferta, sino el de la central con la oferta más cara que haya entrado en generación, en este caso a todas las centrales, desde la Hidráulica Cantábrica, hasta las Central de carbón Penibética cobrarán los 60 €/MWh que ofertó esta central. Obviamente la Central de fuel Arábiga no cobrará nada, porque ha quedado descartada. Las centrales pueden también, obviamente, no ofertar en el pool.
Observareis que hay varias centrales que ofertan a 0 €/MWh y esto es porque cuando pueden ofertar estas centrales quieren generar se pague lo que se pague. Cuando hay viento la eólica quiere inyectar a red, cuando hay sol la fotovoltaica quiere inyectar a red. Los únicos costes que tienen estas plantas son de capital (amortizaciones de los créditos necesarios para su construcción) y un coste muy pequeño de mantenimiento (aún más pequeño en el caso de la fotovoltaica al no tener mecánica). El viento y el sol siempre cuestan lo mismo, 0 €/MWh así que siempre es más caro mantener una eólica inoperativa, cuando hay viento, que inyectando, por barato que sea el precio que obtenga el MWh del pool eléctrico. Con la hidráulica es aún mejor. Básicamente todas las centrales hidroeléctricas están amortizadas, con lo que los beneficios para el propietario son muy grandes se trate del precio de la electricidad que se trate. Respecto a las nucleares son plantas que no se pueden parar y arrancar fácilmente. Una parada en condiciones y sin consecuencias requiere en ocasiones más de un día y un arranque lo mismo. Las centrales nucleares, por restricciones de la misma tecnología nuclear, no pueden entrar y salir del sistema, así que siempre ofertan sea cual sea el precio del MWh. Por otro lado el coste de capital de estas centrales es muchísimo mayor que en el de otras convencionales. Son centrales en que el combustible cuesta relativamente poco, pero su construcción cuesta mucho. Aunque en ocasiones se pierda dinero con su MWh generado, se pierde más parando la central nuclear, porque todas ellas, excepto Garoña, aún están pagando las amortizaciones de los créditos que permitieron su construcción. Es decir, las nucleares solo tienen la opción de estar siempre, o no estar, pierdan o no dinero. No pueden andar encendiendo y apagando el reactor cada hora.
A partir de este punto, las centrales convencionales, con la excepción ya vista de la nuclear, ofertan en función del coste de del combustible y las amortizaciones de capital.
En este sentido una central eléctrica, renovable o no, tiene tres elementos que determinan el coste de su energía. Amortizaciones de capital (devolver al banco el préstamo que dejó para su construcción), bajas en las térmicas convencionales, elevados en las renovables y muy elevados en el caso de la nuclear. Coste del combustible: Elevado y variable en las térmicas convencionales, medio y variable en la nuclear y cero en el caso de las renovables (el sol, el viento, etc... son gratis). Y los costes operativos muy bajos en las renovables (especialmente la hidráulica y la fotovoltaica) y medios en el resto de las tecnologías.