jueves, diciembre 10, 2009

La importancia de las energías renovables


Planta eólica de Sierra Quemada, 33MW, Pozohondo (Albacete) X. Cugat

Se oye últimamente hablar mucho de energía y más en concreto las energías renovables. Se hace imprescindible comprender de que hablamos cuando hablamos de energía y entender que son y que potencial tienen las energías renovables.

La importancia de la energía
Antes de empezar es realmente importante que entendamos que significa la energía y que es lo que realmente usamos. Una persona tiene un gasto energético de 2kWh diarios. Un litro de gasolina contiene una energía de 10kWh. Cuando uno realiza un viaje Huelva – Madrid, si consume 8l/100Km, está consumiendo unos 50l de gasolina, equivalentes a 500kWh. O lo que es lo mismo, si una persona realiza ese viaje en un día y no existieran fuentes energéticas requeriría el trabajo de 250 personas el poder realizar ese viaje.
Obviamente no existe la ‘tecnología’ para realizar ese viaje con el esfuerzo energético humano, pero las cifras nos dan idea de lo que realmente nos está aportando la energía. De lo que son fuentes como el petróleo, una fuente de energía fantástica que en solo 1l contiene tanta energía como la que desarrollan cinco personas en un día.

Pongamos otro ejemplo, una familia de 4 personas puede consumir fácilmente en su hogar unos 600kWh totales de energía (electricidad + gas) en un solo mes. Esto representa la energía de 300 ‘esclavos energéticos’. Al mismo tiempo nos permite ver que realmente el transporte representa un gasto energético descomunal.

Pero la energía tiene otros usos mucho más importantes en la actualidad. Hemos pasado en un par de siglos de una población humana de unos 1.000 millones de habitantes a unos 7.000 millones de habitantes. Si hemos sido capaces de alimentar toda esta población ha sido posible porque estamos casi literalmente convirtiendo energía en alimentos. Energía que mueve tractores, crea fertilizantes, transporta alimentos de un lugar a otro. Para poner una cifra a todo esto, en Estados Unidos la alimentación es responsable de un 19% de su consumo energético. Por tanto sectores básicos que aparentemente no tienen nada que ver con la energía, como la alimentación, la medicina… en realidad tienen mucho que ver.

Sin embargo poder seguir obteniendo energía a los ritmos actuales dista de ser algo razonable y seguro en un futuro inmediato. Es decir, nuestras necesidades básicas distan de estar garantizadas y aún más, realmente están seriamente amenazadas en la actualidad.

Toda la expansión científica, tecnológica e industrial que han supuesto los últimos 200 años ha sido posible gracias a la explotación de diversas fuentes de energías no renovables, es decir agotables, especialmente el carbón, el petróleo y el gas. Solo estas tres fuentes, los llamados combustibles fósiles,  representan el 81% del consumo energético mundial (35% petróleo, 25% carbón y 21% Gas Natural). El petróleo es usado masivamente en el sector del transporte, mientras carbón y gas son usados para producir electricidad. En nuestro país, en la actualidad, el gas genera el 29% de nuestra electricidad. Del 19% no procedente de combustibles fósiles tenemos que el 13% proviene de las renovables y el 6% de la energía nuclear.

El suministro energético del petróleo está amenazado ya que el declive en su producción ya empezó según se deduce de la lectura de distintos informes internacionales. Si no hemos notado el efecto es debido a que la actual crisis económica mundial ha reducido el consumo energético, pero tan pronto como la economía retome la senda ascendente se verá el resultado de no tener más petróleo disponible. En realidad lo que va a pasar con el petróleo ya se sabía hacía décadas. Hasta el año 1980 se descubría más petróleo del que se consumía, con lo que las reservas aumentaban. A partir de esta fecha la tendencia se invirtió consumiéndose mucho más de los que se descubría. La tendencia se ha consolidado enormemente en los últimos años. En la actualidad por cada cuatro barriles de petróleo que se consumen, solo se descubre uno. El cenit del gas, es decir el año a partir del cual la extracción de este empezará a disminuir por el agotamiento de los recursos, se estima en unos 10 o 20 años, y la del carbón en una cifra muy oscilante que estaría entre 50 y 100 años. Esto son cifras con consumos actuales, si el consumo se incrementa los años que faltan para el cenit se reducen. Substituir petróleo por una de estas fuentes y seguir consumiendo más energía globalmente disminuiría enormemente la fecha en que se produciría el cenit de las otras fuentes. Todo esto, sin ni siquiera hablar de problemas medioambientales, ya que el carbón es la fuente energética más contaminante. 1kWh generado mediante carbón contamina tres veces más que otro generado mediante gas, por poner un mero ejemplo.
En lo que respecta a la energía nuclear, el consumo de uranio mundial actual se estima en 65.000t anuales, mientras que la minería actual solo puede suministrar 40.000t. El resto de uranio sale de reservas estratégicas y de los distintos programas de desarmamiento nuclear existentes.


Construcción de la Planta Fotovoltaica Solana de Miramontes, 1,5MW (Extremadura) X. Cugat

Eficiencia energética y energías renovables
Por tanto hemos visto que tenemos un serio problema que se nos viene encima. No es un problema que vayan a ver dentro de innumerables generaciones, ni nuestros nietos o hijos. Es un problema que vamos a ver nosotros. La energía condicionará la política, las guerras, el medioambiente y la economía de nuestro siglo y si no es gestionada de manera adecuada puede hacer perecer a la humanidad. No es que lo diga yo, es que lo dicen personalidades como Jesús Caldera, ex ministro de trabajo en gobiernos de Zapatero y otras muchas personalidades tanto españolas como mundiales.
Solo existe una solución. Olvídense de fantasías tecnológicas vendidas por los grupos de presión de las energías que van a morir, como la tecnología de captura de carbono (enterrar los gases contaminantes bajo tierra) de la que solo existe una planta experimental en construcción en el mundo y con un coste de la energía muy superior al de cualquier renovable, o fantasiosos desarrollos de reactores nucleares que no han funcionado en los últimos setenta años y no lo van a hacer en los setenta siguientes.
Necesitamos soluciones ya y las únicas que pueden aportar esas soluciones son las energías renovables. Energías limpias que extraen la energía de la naturaleza. Y justamente España tiene un potencial enorme para poderse beneficiar de ellas. Hemos visto como se sucedían gran cantidad de noticias sobre cantidades de energía eólica producida.  Los aerogeneradores ya nos resultan familiares a todos nosotros. Las plantas solares también empiezan a resultar familiares. La tecnología Española está desarrollando técnicas que se están poniendo en marcha y que son absolutamente novedosas. En Andalucía existe la primera planta solar del mundo capaz de almacenar energía y, por tanto, generar de manera continua electricidad mediante energía solar día y noche. Se está aprendiendo a utilizar la energía de las olas y recordemos que España es uno de los países de Europa con más kilómetros de costa. La geotérmica, la energía que transforma el calor del interior de la tierra, se va a desarrollar en el próximo decenio permitiendo generar las 24h del día los 365 días del año de manera predictible. Al mismo tiempo las centrales hidráulicas de bombeo ya existentes en toda España permiten almacenar energía eléctrica. Es decir, estamos en el camino, pero debemos apretar el paso y ser firmes, no dejándonos condicionar por las noticias falsas que nos cuelan día sí, día también en los medios de comunicación los distintos grupos a favor del carbón, el gas, el petróleo y el uranio. Hemos de ser ciudadanos responsables y tomar un tiempo para informarnos. Nuestra información significará que somos más difíciles de manipular. La información es vital y como hemos visto, tomar el camino erróneo en este momento crítico puede resultar catastrófico incluso para nosotros mismos.

Pero las renovables no lo son todo. Es muy importante ser mucho más eficientes, es decir consumir menos energía para hacer lo mismo. La apuesta por un ferrocarril eficiente es fundamental. El ferrocarril es el único medio de transporte hoy que consume electricidad y por tanto, energía renovable, aunque solo sea una parte. Además consume entre una quinta y una sexta parte de la energía por pasajero que consume un avión o un coche. Hemos de eliminar el despilfarro energético. Aquí es donde nuestras acciones individuales pueden hacerse notar más. Apagar la luz a tiempo, no usar el vehículo más que lo imprescindible… son acciones muy importantes.

En resumen estamos en la encrucijada, las cosas pueden ir muy mal, pero la buena noticia es que la humanidad y especialmente España tiene los recursos, la tecnología y la capacidad para que no lo hagan. Usémoslas.

NOTA: Este artículo será publicado próximamente en la revista CascarrabiaS, de la asociación ATG.

10 comentarios:

  1. Ya me gustó cuando lo leí, y me reafirmo de nuevo. Sencillo, directo, y comunicativo.

    ResponderEliminar
  2. ¿Jesús Caldera es una personalidad? ¿Y ese que sabe de energías renovables?. Estoy de acuerdo en parte con tu artículo, pero si vas a emplear argumentos de autoridad más vale que pongas otros ejemplos.
    Y en cuanto a los estudios que citas, pon links. Los argumentos del tipo "muchos estudios serios dicen..." sirven para todo.

    ResponderEliminar
  3. Poco mas puede añadirse, excelente artículo. También suscribo lo de eliminar la referencia a Caldera.

    ResponderEliminar
  4. Estupendo. Me lo he leído todo y de un tirón, que ya es mucho decir con la avalancha de entradas que tenemos que gestionar los interneteros. :)

    ResponderEliminar
  5. Sobre la referencia a Jesús Caldera. Desde este blog pretendemos ser neutrales políticamente. Es decir, si hay que dar caña, se da, pero si hay que alabar, se alaba. Creo que hay unas cuantas muestras de 'dar caña' al PSOE y al PSC en algunos artículos.
    Pero para mi no hay duda que Jesús Caldera es una persona muy bien preparada, es ex-ministro de trabajo, ha ocupado diversos cargos en el PSOE y es responsable de la Fundación IDEAS para el progreso, el think-tank progresista del PSOE. Desde ese lugar presentó hace unos meses un plan para llegar al 100% de energía renovable en el 2050 y conoce muy bien el tema energético y de las energías renovables.

    Para mi está diáfano y radicalmente claro que es lo que se podría llamar una personalidad. El ejemplo está puesto simplemente porque como es sabido hace unas pocas semanas tuve la ocasión de verlo en directo.

    Para mi, sin duda, Caldera es una persona que no conocerá los detalles técnicos de como funciona un aerogenerador, pero que si sabe y mucho, de energía y renovables, es una voz importante en el PSOE, aunque, obviamente, no la única.

    ResponderEliminar
  6. Xavier, y la Biomasa?.......

    ResponderEliminar
  7. Estupendo artículo. También me gustaría haber encontrado más enlaces (referencias-fuentes) en algunas de las afirmaciones.

    ResponderEliminar
  8. Bueno, la biomasa está claro que estaría dentro de las renovables. Pero la biomasa para que sea realmente renovable tiene que cumplir una amplia gama de requerimientos que se deben certificar.

    Y solo he puesto un par de links, porque es un C&P de un artículo para una revista impresa en la que, claro, no hay links. De todas maneras muchas de las afirmaciones ya están en otros artículos de este mismo blog.

    ResponderEliminar