El gobierno Berlusconi había aprobado diversas medidas con el objetivo de empezar a construir 4 reactores nucleares EPR para el 2013, produciéndose su conexión a red en el año 2020. Pero recordemos que Italia no tiene ningún reactor nuclear, debido a que los resultados de un referéndum realizado en 1987 fueron negativos a este tipo de energía. Las demandas presentadas por la oposición ante los planes nucleares de Berlusconi han surtido efecto. El tribunal constitucional italiano ha dictaminado que los nuevos reactores solo podrán construirse si se realiza un nuevo referéndum y su resultado es favorable.
Es un golpe para eléctrica italiana ENEL que ya había materializado un convenio, para el desarrollo de los reactores nucleares, con la francesa EDF y podría afectar negativamente a su cotización en bolsa. El gobierno italiano prevé realizar el referéndum este mismo año, en una fecha aún no concretada entre el 15 de abril y el 15 de junio. Si el resultado del referéndum es desfavorable a la construcción de nuevas centrales nucleares, la paralización temporal que impone ahora el tribunal constitucional, se convertiría en permanente.
Distintos sondeos realizados anteriormente han mostrado que la opinión pública italiana está mayoritariamente en contra de la energía nuclear.
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